La pérdida dentaria no solo afecta la estética facial, sino que también compromete funciones vitales como la masticación, la fonación y la digestión. La falta de estímulo en el hueso alveolar ocasiona una reabsorción ósea progresiva, lo que puede generar colapso facial, desplazamiento de piezas vecinas y alteraciones en la articulación temporomandibular (ATM).
Además, masticar inadecuadamente puede derivar en trastornos digestivos, desnutrición y dificultades para mantener una dieta equilibrada. A nivel psicológico, la pérdida dental está asociada con baja autoestima, inseguridad y aislamiento social.
La implantología oral ofrece una solución integral, permitiendo restaurar la función, prevenir la pérdida ósea y mejorar significativamente la calidad de vida del paciente.
Mi objetivo es brindar una atención odontológica segura, empática y especializada, donde cada paciente se sienta escuchado y en confianza. Cuento con 10 años de experiencia y enfoque en implantología oral, ayudando a restaurar la salud bucal, funcionalidad , autoestima mediante tratamientos personalizados y tecnología de vanguardia. Trabajo con compromiso y sensibilidad, sabiendo que cada sonrisa tiene una historia.